¿Móviles chinos? ¡No! ¡Gracias!
Yo era de la opinión de que si un producto es bueno y barato, aunque venga de China, habrá que darle una oportunidad.
Sin embargo, recientemente he cambiado de opinión. La causa no es otra que, sí, he de reconocerlo: Me han engañado.
Vayamos por partes.
Conocí la tienda de http://es.aliexpress.com/ a través de un amigo, y comencé a hacer pequeñas compras de las que, sinceramente, no me arrepentí casi nunca. En todo caso, alguna sí era bastante mala, pero el riesgo eran unos pocos, muy pocos euros. En alguna ocasión, incluso me gustó mucho el producto adquirido.
Algunas cosas de las que compré:
Un mando para la PlayStation 3 por poco más de 8 euros.
Una cartera-billetera de bolsillo por menos de 4 euros.
Un cubrevolante de piel por 3 euros y poco.
Una batería de portátil por menos de 18 euros.
Algunas cosas más, todas ellas bastante ajustadas de precio.
Todo servido en casa tras esperar bastante tiempo (no tenía prisa), pero avalado por un sistema de protección al cliente que, supuestamente, garantizaba la inversión y protegía el poco agradable hecho de que había que pagar por adelantado.
Mi primera desventura fue la adquisición de un brazalete de sujeción del móvil para cuando voy a caminar, que se puede examinar en este enlace. Se suponía que debía llegar antes de 30 días, y cuando estaba a punto de caducar el periodo de reclamación, recibí un mensaje que "suplicaba" que no solicitase la protección del cliente, porque el producto estaba en camino. Como no tengo por qué fiarme, no hice caso. Puse en marcha el mecanismo de protección y, efectivamente, me devolvieron mi dinero sin ningún problema. Aunque más tarde llegó la mercancía y todo se complicó... porque YO SOY HONRADO. Y tuve que hacer un nuevo pedido, solicitando que no se me enviase el producto para pagar el que me llegó tarde, pero llegó. Y pagando unos centimillos más por el cambio del dólar, que no supieron o no quisieron arreglar. Escribiré los detalles de esta compra, documentando adecuadamente, en otro artículo.
No obstante, el resultado fue medianamente satisfactorio. La mercancía no llegó a tiempo y me devolvieron mi dinero. Eso es lo importante y lo que me hizo confiar.
Así que me decidí a hacer una compra algo más aventurada: Un teléfono móvil.
Tras barajar varias posibilidades me decidí por ÉSTE. Un Lenovo con pantalla de 5,5 pulgadas (muy grande, es lo único cierto), con 8 núcleos, 2 GB de RAM, alta resolución... y por 89 euros. ¡Increíble! Y al ser Lenovo me daba más confianza, ya que se trata de una marca que conozco de la venta de ordenadores y meparece parecía de confianza.
Tras 45 días de espera, el teléfono llegó. El aspecto era el prometido, pero...
Por dentro NO había 8 núcleos, sino 2.
Por dentro NO había 2 GB de RAM, sino 512MB
Por dentro NO había una resolución de 1920x1080 sino de mucho menos
Por dentro NO había una lente de 13 Megapíxeles sino de 5
TODO UN ROBO.
(Continuará...)
Yo era de la opinión de que si un producto es bueno y barato, aunque venga de China, habrá que darle una oportunidad.
Sin embargo, recientemente he cambiado de opinión. La causa no es otra que, sí, he de reconocerlo: Me han engañado.
Vayamos por partes.
Conocí la tienda de http://es.aliexpress.com/ a través de un amigo, y comencé a hacer pequeñas compras de las que, sinceramente, no me arrepentí casi nunca. En todo caso, alguna sí era bastante mala, pero el riesgo eran unos pocos, muy pocos euros. En alguna ocasión, incluso me gustó mucho el producto adquirido.
Algunas cosas de las que compré:
Un mando para la PlayStation 3 por poco más de 8 euros.
Una cartera-billetera de bolsillo por menos de 4 euros.
Un cubrevolante de piel por 3 euros y poco.
Una batería de portátil por menos de 18 euros.
Algunas cosas más, todas ellas bastante ajustadas de precio.
Todo servido en casa tras esperar bastante tiempo (no tenía prisa), pero avalado por un sistema de protección al cliente que, supuestamente, garantizaba la inversión y protegía el poco agradable hecho de que había que pagar por adelantado.
Mi primera desventura fue la adquisición de un brazalete de sujeción del móvil para cuando voy a caminar, que se puede examinar en este enlace. Se suponía que debía llegar antes de 30 días, y cuando estaba a punto de caducar el periodo de reclamación, recibí un mensaje que "suplicaba" que no solicitase la protección del cliente, porque el producto estaba en camino. Como no tengo por qué fiarme, no hice caso. Puse en marcha el mecanismo de protección y, efectivamente, me devolvieron mi dinero sin ningún problema. Aunque más tarde llegó la mercancía y todo se complicó... porque YO SOY HONRADO. Y tuve que hacer un nuevo pedido, solicitando que no se me enviase el producto para pagar el que me llegó tarde, pero llegó. Y pagando unos centimillos más por el cambio del dólar, que no supieron o no quisieron arreglar. Escribiré los detalles de esta compra, documentando adecuadamente, en otro artículo.
No obstante, el resultado fue medianamente satisfactorio. La mercancía no llegó a tiempo y me devolvieron mi dinero. Eso es lo importante y lo que me hizo confiar.
Así que me decidí a hacer una compra algo más aventurada: Un teléfono móvil.
Tras barajar varias posibilidades me decidí por ÉSTE. Un Lenovo con pantalla de 5,5 pulgadas (muy grande, es lo único cierto), con 8 núcleos, 2 GB de RAM, alta resolución... y por 89 euros. ¡Increíble! Y al ser Lenovo me daba más confianza, ya que se trata de una marca que conozco de la venta de ordenadores y me
Tras 45 días de espera, el teléfono llegó. El aspecto era el prometido, pero...
Por dentro NO había 8 núcleos, sino 2.
Por dentro NO había 2 GB de RAM, sino 512MB
Por dentro NO había una resolución de 1920x1080 sino de mucho menos
Por dentro NO había una lente de 13 Megapíxeles sino de 5
TODO UN ROBO.
(Continuará...)
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